CÍRCULO ROJO.- Arcadio Pariente Salazar ha escrito tres cuentos con moraleja para invitar a sus lectores a un debate en el que debe reflexionar sobre las cuestiones más obvias de la vida. Escribió los tres cuentos en diferentes etapas; el primero viene de la mano de una experiencia personal, en concreto, un reencuentro. El segundo nació durante unas vacaciones en la famosa localidad de Almería, Roquetas de Mar. Y el tercero fue fruto de unos meses donde escribió de manera intermitente.
Lo más destacable de ‘Los tres cuentos de la conciencia’ es que sus personajes tienen el coraje y la valentía necesaria para luchar contra las adversidades e intentar construir un futuro mejor. La superación es el concepto básico de estas líneas.
Va dirigido a los lectores jóvenes, exactamente a partir de los 12 años que ya cuentan con una conciencia capaz de construir críticas objetivas y leer entre líneas. Arcadio Pariente Salazar se ha inspirado en su propia vida para comunicar estos conocimientos que la experiencia le han otorgado.
“Los lectores encontrarán los valores que hacen grandes a las personas y puede que este libro les toque el alma si están preparados para ello”, reflexiona el autor.
SINOPSIS
A través de escenarios diferentes, incluso de tiempos y personajes ficticios, los tres cuentos de la conciencia nos llevan, de un modo poético, aunque crudo, a una realidad despellejada que nos engulle en una reflexión con cada línea que leemos. Su profundidad ha sido redactada por la cabeza y la mano de Arcadio Pariente Salazar y la sutileza de su escritura por su alma. Con unos toques de realidad, profundas reflexiones y la naturaleza como protagonista conductora, deja abierto un camino que cada uno tiene que moldear según su manera de pensar y sentir. ‘El pez que quería volar’, el primero de los cuentos, nos lleva, gracias a un pájaro y a un pez, a conceptos como el recuerdo, la amistad, la evolución, la autocomplacencia e, incluso, la autocrítica. Es un cuento que, de la mano de nuestros protagonistas o, mejor dicho, del pico del pájaro y de la boca del pez, nos hará plantearnos cuestiones tan obvias, como a veces tan olvidadas, de la propia vida.
El segundo cuento, ‘El joven prisionero’, vuelve a utilizar animales como actores de esta película escrita que nos descubre la libertad, en toda su expresión, y mucho más. Más que una película, podrían ser unos dibujos animados que cobran seriedad con su trasfondo, un bonito cuento que desde un zoo lanza mensajes a quien los quiera escuchar.
‘El sueño del vigilante’, tercer y último de los cuentos de esta entrega, cambia y deja que un niño, Fernandito, nos ponga en situación y actitud ante las cuestiones que se plantean. De esta manera, un vigilante imaginario, que aparece en sus sueños, le guía por un recorrido existencial que, desde una cierta perspectiva, pone en relieve contradicciones humanas como la guerra, un futuro esperanzador o hace referencia a cuestiones místicas.
AUTOR
Nació en Andalucía, la primera infancia, con caballos, su padre domador, animales y el campo en su finca de un pueblo bonito de Sevilla. El futuro de sus hermanos mayores lo arrastró a Cataluña, donde completó su infancia y sus estudios. En la adolescencia, ya estaba impregnado de la cultura catalana y enamorado de Barcelona, compraba plumas Mont Blanc y soñaba con ser pintor, pero no escribía. Tuvieron que pasar muchos años hasta que una persona sabia le dijo que esa obsesión por las plumas tal vez era un recuerdo, una reminiscencia de otra vida. Hasta entonces, las motocicletas y los viajes eran toda su vida. Dos hijas para curar el machismo de la sociedad y darle sensibilidad. Un trabajo artesanal ejecutado por más de cuarenta años. No parece gran cosa la biografía de los autores noveles, esperan que sus obras gusten o tengan éxito para adornarlas. La importancia de los libros y la propia literatura se pierden, se secan como plantas que nadie riega, se esconden abrumadas, despreciadas por el mundo digital, la superficialidad del tiempo tecnológico, la desidia de la sociedad, hacen más difícil el ya duro trabajo de escribir, pero nada puede con la ilusión de los nuevos escritores que usan su tiempo libre para regar la hermosa planta de la literatura y su nueva flor, el libro digital, el e-book, nacida de una rama trepadora que coloniza los aparatos electrónicos. En ella depositamos todas nuestras esperanzas.