¿Cómo fue el proceso de escritura de esta obra?
Esta es una compilación de diferentes textos y poemas escritos durante los últimos años en diferentes lugares y situaciones. La mayor complejidad de la obra fue poder contextualizar y dar forma a esa diversidad de temáticas y ambientes. De ahí la idea de hacerlo girar todo sobre una única protagonista (una planta carnívora) y las estaciones del año.
¿Por qué este título?
Una planta carnívora puede verse como una anomalía dentro de la categoría a la que pertenece. Y creo que todos y todas, en algún momento de nuestras vidas, podemos sentirnos así, como auténticas anomalías (o plantas carnívoras) respecto a lo que sentimos y el entorno que nos rodea. Me pareció la metáfora idónea para reflejar las paradojas que siempre rigen lo que somos y lo que hacemos.
¿Por qué la poesía como mecanismo de expresión?
La poesía te permite jugar con imágenes, giros y descomponer las palabras y los ritmos de una forma que muchas veces no puedes hacer con la narrativa. Te da la libertad como escritor de retorcer el lenguaje de modo que nada signifique nada y signifique todo. A mucha gente le cuesta entender este género porque nada en él es seguro, definido o concreto. A mí es justamente lo que más me atrae. Y que cada persona descifre cada poema, no por las palabras que lo componen, si no por lo que les hace sentir.
¿Cómo recomendaría Autobiografía de una planta carnívora a sus potenciales lectores?
Para mí la clave está en lo que se explica en la sinopsis: “cualquiera de nosotros puede ser una plan carnívora”. Esta es un conjunto de poemas inmersos en una especial e irónica sensibilidad, que explora sentimientos profundos a través de objetos y situaciones cotidianas, buscando un enfoque diferente. La constante son las pérdidas porque es algo recurrente en la vida de cualquiera. Cada poema profundiza a su manera en ellas y en cómo tratamos de superarlas…o en cómo nunca lo conseguimos.
¿En qué género clasificaría Autobiografía de una planta carnívora?
Es poesía sin reglas, muy próxima a la prosa poética libre. Trato de escribir como creo que somos las personas: a veces cercanas pero, muchas otras, complejas, oscilantes y poco accesibles.
¿Se atrevería con otro género literario?
Por qué no. Aunque es cierto que me siento más cómodo con lo breve, concentrar muchas esencias en un frasco pequeño. Y esto es casi inviable en géneros como la novela o el ensayo. Pero siempre hay temáticas que tengo en mente a las que no se les podría aplicar un género como la poesía.
¿Algún proyecto en ciernes?
Sí, siempre me ha gustado observar y escribir (aunque nunca lo haya reflejado en forma de diario o algo así). Así que, en los escasos momentos que puedo disponer de tiempo y calma (mental sobre todo), siempre busco un hueco para dar forma a lo que considero mi proyecto personal. Espero poder tener preparado para finales de 2022 un nuevo libro, que, en este caso, combinaría la poesía con el relato corto.
¿Cuáles son tus principales influencias literarias, filosóficas y artísticas? ¿Cuáles se manifiestan en esta obra?
Me gustan especialmente los estilos que mezclan la realidad con lo onírico; que ahondan en la tragedia de lo cotidiano, por resumirlo de alguna manera. Mis influencias en la actualidad son variadas: desde Alejandra Pizarnik (su “Poesía completa” es mi obra de cabecera en estos momentos) a Charles Bukowsky, pasando por Julio Cortázar o Mario Benedetti. Pero aún me queda mucho por descubrir y, desde luego, que aprender. Esta obra tiene mucho de paseo por el “yo interior”, con un espejo como compañero de viaje al que todos los días nos enfrentamos y el saber que todo, más tarde o más temprano, caduca.
¿Ha recibido ya algún feedback de los primeros lectores?
Estoy muy agradecido por el recibimiento que ha tenido la obra y las impresiones que me han transmitido. La mayoría de las personas coinciden en que este libro pide leerlo y releerlo varias veces. Sin prisas. Hay muchos detalles e imágenes de la vida cotidiana que van a calar de forma diferente en cada persona, según el momento vital en el que se encuentre.
¿Quién es?
Zésar Mart. Su trayectoria vital y profesional se ha enfocado en ayudar a colectivos vulnerables, ofreciendo soluciones de empleabilidad y de cambio. Siempre han sido referentes para él los constructores de palabras, la caducidad que conlleva el tiempo y los pequeños terremotos cotidianos. Le gustan las ciudades y sus miradas, que todavía le siguen sorprendiendo.