Ángel suele decir que, como ha tenido mucha suerte para disfrutar de los 83 años. Gracias a ellos sigue sumando experiencias, conocimientos y habilidades.
De ese amplio bagaje de vida, ha ido coleccionando vivencias y claves éticas seguras, por las cuales, goza de una cierta lucidez y cordialidad para aportar una convivencia más amable y viable.
Uno de sus principios para practicar esa fraternidad, es el extraído de la filosofía humanista.
En ese contexto, publicó su primer libro Caminamos, a través de cuyo relato quiso compartir su respuesta ante situaciones límite.
En esta ocasión, presenta esta novela, Dos almas gemelas y dos cuerpos distintos, que siendo ficticia, creativa, reflexiva, divertida…, también es real, porque ha surgido de su cerebro.
Una trama asentada en el tiempo y el espacio, por cuyo paisaje complicado circulan personajes emprendedores, clásicos, valientes, modernos, terrestres y extraterrestres con vida propia.