Es muy emotivo para mí poder presentar en el capítulo 11 de este trabajo un fragmento de ánfora con grafito procedente del poblado ibérico del Cogulló, ubicado en Sallent, comarca del Bages, Barcelona; donde me criaron y donde hoy vuelvo a residir después de 30 años. “El poblado ibérico de El Cogulló, situado en la zona alta de un cerro, posibilitó a sus habitantes, de la tribu de los lacetanos, el control del río Llobregat a su paso por el Pla del Bages. Hay evidencias de ocupación de este poblado desde la Edad del Bronce hasta
el siglo I a.C., convirtiéndose así en uno de los asentamientos ibéricos más importantes de Catalunya.
Con una extensión de 5.000 m2 el poblado destaca por sus murallas de defensa, de más de 130 metros, tratándose posiblemente de un núcleo de carácter estratégico o de control del territorio. El Cogulló forma parte de la Ruta de los Iberos del Museu d´Arqueologia de Catalunya.” www.arqueoxarxa.cat “Los lacetanos se establecieron en la parte central de Cataluña de forma que limitaban al norte con los bergistanos, al este con los ausetanos y los laietanos, al sur con los cessetanos, y al oeste con los ilergetes. Los lacetanos se distinguieron por su fuerte resistencia a la ocupación romana, contra la que lucharon aliándose con otros pueblos ibéricos como los ausetanos o los ilergetes. Fueron sometidos por Catón hacia el 195aC.” http://www.mac.cat/Rutes/Ruta-dels- Ibers/Els-lacetans