Cuando apareció la banda de «Calle Muelle» en 2017, no imaginé que cuatro años después estaría cerrando el candado a una trilogía que creó por el camino un «Incendio en Calle Muelle». Como tantos otros momentos de la historia de Pamplona, la catedral supone un foco de atracción que seduce a santos y bandidos, carlistas y ateos, saqueadores y resistentes. Por suerte, hoy, lejos de aquel esperpento de ciudad antigua partida en tres pedazos, los muchachos de Calle Muelle han podido recorrer nuevos caminos por los últimos siglos de Navarra, gracias a su «retrómetro». Nunca podían imaginar que les esperaba una enmarañada aventura, a la búsqueda de un misterio casi indescifrable: El enigma de la Catedral Gótica de Pamplona.