Dani, un agente de seguros, descubre lo insípida que puede ser la existencia privada de aquello que él contribuye a erradicar: la inseguridad. Inicia entonces una búsqueda irracional que lo lleva desde Madrid hasta un pueblecito del Sur, donde el amor y la muerte alumbran en él un hombre ignorado, capaz de arriesgar, con absoluta frialdad, su vida y la de cuantos lo rodean, sólo por vivir un sueño.
La personalidad de Dani se confronta con las de Mario y Carmen, ecos de Don Juan y de la cigarrera de Ronda, aunque a esta Carmen se le da mejor matar que morir. Cerrando el grupo de personajes importantes encontramos a Concha, tan respetada por el autor que la mantiene incontaminada en su paraíso malagueño, al margen de toda acción criminal y sórdida. Su misión será situar a Dani ante el gran reto de cuestionar su propia masculinidad.