«No tengo la imaginación necesaria para inventarme que hace miles de años existió una civilización muy avanzada que dejó por
todo el planeta pruebas incuestionables de su presencia y después desapareció. Si he alcanzado esta idea ha sido a través de la observación y la reflexión».
La Pirámide de Toth es un viaje que, partiendo de la pequeña iglesia de Veracruz, en Segovia, ha conducido a la identificación de un dibujo piramidal en la Tierra que pone en contacto algunos de los lugares con mayor simbolismo religioso, cultural y esotérico
de la Historia, lugares donde la humanidad ha acudido a orar y a establecer contacto con los dioses: el templo de Salomón, la pirámide de Khufu, el oráculo de Delfos o el templo de Artemisa en Éfeso, son algunos de ellos.
El análisis matemático de las líneas ha permitido identifcar una asombrosa correlación entre las pirámides de Toth, dibujada en
la Tierra, y la de Khufu (Keops), construida en Egipto.
El conocimiento de estos lugares, las líneas que los unen y su significado, ha sido custodiado por una serie de personas de relevancia excepcional a lo largo de los siglos, reservándolo para quienes lo mereciesen y permaneciendo oculto para el resto de la humanidad… hasta ahora.