Estas páginas intentan ser un recorrido por el mundo interior de estos enfermos; hasta dónde puede llegar su sufrimiento, si les queda algo de lo que fueron y no pueden expresarlo o han perdido definitivamente su pasado y se han quedado sin ayer y sin mañana. Los que viven a su lado, los que unidos por el amor y el respeto, o la necesidad, han de convivir con ellos sufren porque no entienden qué hay dentro de ese ser y no saben cómo comunicarse, cómo compartir el día a día, cómo ayudarles a seguir vivos.