En Árelam, la tierra más poderosa del continente de Nueva Elegön, la profecía de Arset se ha cumplido; los enemigos del reino habitan bajo el mismo techo. Muertes a fuego y espada, asesinatos silenciosos, descubrimientos dolorosos, misioneros desmemoriados y un extraño plan son los velos que cubren al reino de los Braigos desde que la reina fue secuestrada y desde que el Homunos, la supuesta Semilla de Poder, fue robada. El silencio e investigación son aliados del rey, un rey que deberá conocer la petición del misterioso enemigo antes de echar a andar una guerra de ejércitos.