En 1972 el padre Pellegrino Ernetti desveló un proyecto secreto del Vaticano para capturar imágenes del pasado. Desde los años cincuenta un equipo científico trabajó en el CRONOVISOR, un dispositivo tecnológico capaz de localizar las ondas electromagnéticas que generan los seres vivos y que permanecen en el éter espacial aún después de la muerte. El Papa Pio XII, impactado al presenciar las imágenes de la pasión y muerte de Jesús de Nazaret, declaró el caso “riservatísimo” y el cronovisor fue incautado.
Parece el argumento de una novela fantástica, pero la noticia se difundió en la prensa internacional y conmocionó a la opinión pública. ¿Es posible viajar por la cuarta dimensión? ¿Qué hay de verdad en este proyecto secreto? ¿Qué misterios esconde esta insólita historia?
El criminólogo e historiador Luis Miguel Sánchez Tostado nos adentra en los intentos del hombre por viajar al pasado y en los inventores de cronocámaras. Su investigación resuelve los enigmas del famoso cronovisor de Ernetti que tanto dio que hablar. Las sorprendentes conclusiones de este ensayo arrojan luz sobre las verdaderas intenciones de la curia Vaticana en aquel caso tan mediático.