El paganismo nunca ha muerto, y el paganismo es la religión de Europa. Con estas dos premisas, este libro presenta a padres e hijos los principales vectores de una fe que, a pesar de los intentos de destrucción que ha sufrido durante dos milenios, nunca ha desaparecido de Europa, y se ha mantenido en diferentes lugares, bajo extrañas formas, con la sabiduría esencial que de ella emana. A través de un diálogo mantenido en realidad por el autor con un niño que se pregunta por lo que hay detrás de la Noche de san Juan, se nos desvelan en estas páginas las principales características del paganismo, contraponiéndolo al cristianismo, y resaltando cuánto ha bebido este último de las ruinas paganas. El objetivo del autor no es otro que concienciar de que no se es por completo europeo si no se es, de un modo u otro, pagano.