JOSÉ DOMINGO HERRERA, como Jesús, solo recomienda velar y orar, ser castos como palomas y astutos como serpientes, dar gracias lo que de gracia se recibe, tener fe que transporta las montañas. Existen muchas personas que tienen dificultades para elevar su alma por medio de la oración, la desean pero no saben pronunciar las palabras precisas. EL PODER DE LAS ORACIONES nos facilita el camino para orar en cada caso y momento. Con estas oraciones seguro sanaremos enfermos, echaremos demonios y daremos paz espiritual a quien lo necesite. Con fe y perseverancia, invoquemos el nombre de Jesús, el del Patrono de cada caso especial con la oración que se cita, y no olvidemos nombrar especialmente, el de la Trinidad Gloriosa. Con esto basta para que el lector salga triunfante.