Victor, el protagonista de nuestra novela, profesor en un instituto de Madrid está a punto de jubilarse .Pero antes su vida familiar sufre un cambio dramático y su mujer le plantea la separación. Su salida a esta situación es la vuelta al pueblo donde nació, en el sur…
La suerte llega a través del teléfono, donde su prima Gloria le anuncia la muerte de su tío Sebastián y le pide que vuelva a Almara para asistir a la lectura del testamento que dejó escrito. Y allí le esperan todos, la tía Amalia, depositaria de la familia, quién le habla de su padre, de las relaciones ocultas que tuvo con la madre de Gloria y del secreto que guarda la familia….En esta atmósfera interviene una pitonisa, Pansy, que pondrá a Victor en la pista de nuevos enigmas, y de un farmacéutico amigo…Pistas que le llevan a la playa de Almara, depositaria de un misterio que las propias conchas encierran y también las piritas de Riotinto como talismán o abracadabra a los pies de un limonero.