Cuando llevas tiempo muy centrado en una especialidad, en el instante menos esperado te aparecen las ideas perfectas para solucionar las dificultades; en este libro, expongo algunos de esos momentos de inspiración.
Después de años en la escalada, comienzo a tener intensas molestias en los dedos. La situación me empezó a preocupar, temía por mi salud y sobre todo por no poder seguir escalando.
Una tarde, me empiezan a venir pensamientos… creo que sé el remedio. Me tumbo en un banco estrecho, eso permite que los brazos caigan por debajo del cuerpo y en esta postura inicio unos estiramientos. A los pocos minutos, percibo un hormigueo muy fuerte, el corazón se acelera, con las primeras series siento y veo como los dedos van perdiendo tensión. En muy poco tiempo ¡se me quita el dolor! Los practico de forma sistemática, funcionan. De esto hace ya unos 7 años, y actualmente hago escalada deportiva, clásica y bulder con muy buenas sensaciones.
En este manual se muestran las técnicas y posturas básicas para practicar los 17 ejercicios propuestos, con unas 80 variantes para llegar a varias capas de tejido conjuntivo.
Los ejercicios están dirigidos para escaladores, ya que con diferencia es el deporte que más sobrecarga los dedos. Pero también son efectivos para:
-Deportes con alta demanda de fuerza: halterófilos, gimnastas, judokas, pilotos de motos, etc.
-Trabajadores que usen intensamente las extremidades superiores.
-Músicos de cuerda: piano, violín, bandurria, etc.
-Personas con artrosis en las manos.
-Terapeutas.