Todos los beneficios de esta edición se destinarán a una organización solidaria de ayuda a los niños más vulnerables de los países en desarrollo.
Imaginemos por un momento que no gozamos de tanta libertad como creemos, que la esclavitud no se ha erradicado, sino que tan solo ha cambiado de forma y que además somos los principales causantes de esta situación. Si tan solo nos lo imaginamos, nada cambiaría, pero ¿qué pasaría si sospechamos que es cierto y empezamos a cuestionar hasta nuestras propias ideas?
Dicen que la lógica permite obtener conclusiones ciertas a partir de premisas, pero cuando la aplicamos obtenemos conclusiones muy diferentes a las comúnmente aceptadas, ideas a veces sorprendentes y a veces transgresoras. ¿Es posible que la certeza no sea lo que pensábamos?