Marejada de sentimientos rebosa mi alma dándole libertad a mis vivaces deseos, donde todo aflora con el hechizo del amor; pero cuando brota es peor que una antorcha.
Amelia Moncada Georgiades
El sentir del alma, en las manos del poeta, se traspasa a papel para así dejar la marca que nos causó la dicha o el sufrimiento. Hay voces que siempre nos siguen, que nunca se olvidan; voces resonantes en nuestra memoria y al cerrar los ojos podemos nuevamente escuchar. Voces, son los recuerdos que llevamos dentro, historias que fueron quedando en el pasado pero que jamás encontraran olvido hasta que el cuerpo deje de respirar y el alma se le desprenda.
Tu alma vuela, Amelia, tu alma vuela,
y traspasa la distancia de los mares,
en la voz rugiente hasta mí llega; puesto que tú existes… Amelia vuelas.
Ricardo Mariano Pedraza Solorio