Song for Ireland es un canto de agradecimiento a la Isla Esmeralda. Es un apasionante viaje de 1600 km bordeando toda su costa, visitando sus pueblos y ciudades, sus iglesias y sus derruidos monasterios —plagados de hermosas cruces celtas—, sus castillos y sus paisajes. Es un sentimiento que expresa mi gratitud a su gente y a las leyendas que la pueblan.
Irlanda es el personaje central de la obra. Es un país que, siendo tan pequeño, ha dado cuatro premios nobeles a la humanidad, además de una infinidad de buenos escritores, grandes actores y directores de cine y unos intérpretes y grupos excelentes, que han hecho una música maravillosa.
Es un viaje a través de su cultura, sus costumbres y su historia, llena de conflictos y miseria, pero también de esperanza y superación.
Este Canción para Irlanda es, en definitiva, un agradecido reconocimiento a la isla.