Todo lo escrito en este libro es una conversación del ser de una persona con su yo interior.
Las preguntas se hacen conscientemente, las repuestas son dadas a través de los registros akáshicos y otras son con escritura automática, tanto lo escrito como los dibujos.
Hay muchas maneras y métodos de hablar con tu yo interior; todo es buscar aquel con el que cada persona se sienta más identificada.
Algunos de esos métodos pueden ser: meditaciones, reiki, registros akáshicos, ejercicios sistémicos, constelaciones familiares o escritura automática.
También hay libros de los cuales puedes obtener mucha información y saber hallar tu yo interior.
Cualquier método es bueno; no hay ni mejor ni peor, porque todos los métodos tienen el mismo fin: el conocernos mejor y saber que todo lo que hay fuera solo son experiencias de las que hay que aprender a cambiar por dentro.
Los nombres y lugares han sido cambiados, por mantener la privacidad de las personas.
Siempre hay una pregunta y una respuesta, aunque la respuesta que nos dan no nos convenza.
Me pregunto: «Entonces, ¿cuál sería la pregunta?».
Y siempre es «¿Por qué?».
Nunca decimos «¿Para qué?».
Sea como sea, queremos encontrar una respuesta a esas preguntas.
Hacemos cursos, leemos libros, vemos videos, etc. Todo está muy bien y ayuda.
¿Pero de qué sirve todo eso si no lo llevamos a la práctica?
Y lo más importante, si no escuchamos a nuestro yo interior, ¡cómo vamos a cambiar!
Si no escuchamos a nuestro cuerpo, que realmente nos habla y nos dice lo que quiere y lo que necesita en ese momento, ¡cómo vamos a cambiar!
«Cuando tu interior habla, tú te callas».