En el Madrid de 1836, el enfrentamiento entre el autoritarismo monárquico y los movimientos liberales, especialmente, los que animan las tertulias intelectuales de la capital, tiñen la vida ordinaria de intrigas, revueltas, conspiraciones y crímenes.
Felipe Gonzaga, un funcionario anónimo, sin implicación política relevante, se convierte, por el agitado devenir de los sucesos, en pieza central de una trama de escalofriantes peligros, incertidumbres y asesinatos. Sin embargo, su único deseo es su relación con Marian, la joven amante que pretende convertir en su esposa. Adscrita al círculo personal más próximo de la viuda regente, María Cristina de Borbón, se debate entre el amor ideado y la lealtad a su posición social.
Aquel verano de 1836, un motín inesperado de la guarnición militar del Palacio de la Granja, donde la familia real pasaba su reposo estival, transforma los planes de cuantos urdían intrigas a su alrededor. También las vidas de Felipe y Marian se transforman definitivamente.
En este novela, Feliciano González edifica una intensa historia de amor condicionada por una cadena de acontecimientos trágicos, con el trasfondo intrigante de hechos históricos críticos en una de las etapas más dramáticas del romanticismo español. El autor nos ofrece su personal visión de la relación entre el poder, la sociedad real anónima y olvidada, y la lucha por la libertad colectiva e individual. Esta historia es también una reflexión sobre el impulso de la vida por abrirse camino a toda costa frente al destino inevitable, a veces anticipado, de la muerte.