Una mujer comienza sus vacaciones, incapaz de distinguir si llora porque acaba de morir su madre o porque ha muerto la niña en la que su madre terminó convirtiéndose, tras una década de alzhéimer.
Intentando curar su herida y colocar aquel dulce y pacífico caos, no se da cuenta de que mientras se desarrollan las distintas etapas de sus vacaciones, ella, como el alzhéimer, también está realizando un sinfín de viajes en el tiempo. Pero, ¿qué es el alzhéimer, sino una burla del tiempo? ¿Y qué es el tiempo, sino un baile de olvidos y memorias? ¿Y qué es la memoria, sino un almacén de recuerdos en el que nadie vuelve a ser quién fue?
Los recuerdos de las vidas de una y otra, las etapas de la enfermedad y la cantidad de juegos y terapias que idearon para sobrellevarla, desencadenan una rocambolesca mezcla de roles, personas, personajes y espacios. Pero así es el alzhéimer: un caótico viaje con dirección a la infancia, un baile entre enfermos y sanos, apariencias y esencias, pasados y presentes o una mezcla de historias con vida y muerte de cualquier historia…