Esta es una historia que nació en mi corazón sin siquiera darme cuenta. Pensé que jamás me enamoraría de tal manera que mi mundo y emociones viajarían entre mis venas llevándome a descubrir esa pasión que no conocía. Mientras aterrizaba, me preguntaba muchas cosas para calmar mi alma. Sin embargo, mi magnánimo no salía un momento de mi ser. Esta es una historia contada en forma poética porque es así como se vivía cada momento. Dos adultos jugando a ser niños, riéndose con esa inocencia que nunca quisieron dar. Y todos sabemos que hay sonrisas que enamoran, y estas eran dos de ellas. Sus primeras miradas eternas que duraban un segundo de eternidad. Sus almas fueron conociéndose en cada momento de sus vidas aceleradas, en los pequeños ataques de romanticismo y jugando al valiente que no quiere querer.
Conectaban sus corazones sin notarlo y sus salidas a leer se convirtieron en una historia de amor escrita que también podía leerse.