En el bosque se presentan una serie de personajes que tienen cada uno una forma particular de hablar. Entre ellos hay tres que presentan las disfluencias típicas del tartamudeo. Ello no impide que se comuniquen y que todos disfruten de jugar juntos.
“El bosque de los animales parlantes” es un cuento para poder trabajar con niños que tartamudean, y también para hablar del respeto y de la diversidad con todos los pequeños.
Cuando hablamos con un niño que tartamudea es importante:
-No tratar de ayudarle con: “respira”, “tranquilo”, “habla más despacio” o terminando sus frases.
-Atender a QUÉ dice, no a cómo lo dice.
-Hablar con él lento y pausado.
-Darle TIEMPO: tiempo de escucha activa, tiempo de compartir momentos comunicativos relajados y tiempo para que termine su mensaje.