Ambientada en Toledo y Madrid —la acción discurre también entre Toledo, Albacete, Las Palmas de Gran Canaria y Tenerife—, el protagonista se desenvuelve para llevar a cabo lo que él considera justicia. Cuando el Dr. Armando Antúnez Romero, reconocido cirujano, se jubila, se dispone a llevar a cabo lo que lleva años planifcando: su venganza y satisfacer, así, su ansia de justicia. Uno a uno va eliminando con frialdad despiadada a los objetivos de su venganza.
A lo largo de la historia, el lector se verá envuelto en las coartadas de las que se sirve Armando para llevar a cabo su plan y asistirá a un fnal tan inesperado como sorprendente.
Al contrario que en otras novelas policíacas, en Cangrejos de río el lector no esperará al desenlace para saber quién es el asesino. Lo sabe desde el inicio de la novela. A lo largo de sus líneas, el interés estriba en cuál será su próxima víctima y cómo conseguirá realizar su «afán de justicia».
Sorprenden la impasibilidad y el dominio de sus nervios al cometer los asesinatos. Pero más sorprendente es su fnal. El desenlace es conciso, brusco, contundente e inesperado para el lector.
Cangrejos de río es una obra de gran valor literario, escrita con un estilo fresco y un lenguaje llano y sencillo, lleno de diálogos, que atrae el interés del lector.