Allá por la década de 1950, en un pueblo de la Sierra Oeste Madrileña. Fhoti, un niño de cinco años se encontraba perdido en el bosque. Buscaba a su mamá sin saber que había fallecido. Chapín, un joven que vivía en el bosque desencantado por una relación de amor con Ursulina. Su amada.
Lo encontró en unos juncales que crecían junto al frescor de una fuente. Y era una noche brillante; iluminada por la luna y las estrellas. Chapín seguía luchando por el amor que aún sentía por su amada. A Ursulina le pretendía Roberto, uno de los hijos de los marqueses. Los padres de Ursulina hacían todo cuanto estaba en sus manos para que dicha relación fuese posible. Ursulina ingresó en el preventorio del pueblo. ¿Quería ser monja cómo se había dicho o pretendía ocultar el crecimiento de su tripa? Eran tiempos complicados para las madres solteras. ¿Conseguiría Chapín entrar en el preventorio para ver a su deseada Ursulina? ¡Necesitaba una explicación! ¡Necesitaba verla!