La protagonista de esta obra es una joven que tras enfrentarse a la perdida personal acaba cayendo en una profunda depresión que le robará todas sus fuerzas e ilusiones.
CÍRCULO ROJO.- La depresión y la ansiedad son enfermedades invisibles y muy solitarias. El estigma y el prejuicio obligan a sus víctimas a callar su dolor por miedo a ser juzgados. Es por eso que la joven autora, Camila Castellanos, ha querido darles voz a través de su obra: ‘Marcas de una sombra’.
Se trata de un libro dedicado a todos aquellos que estén luchando contra una enfermedad mental y en especial al propio padre de la joven escritora cuya pérdida aún trata de superar. “Me han inspirado aquellas personas que luchan a diario con problemas mentales, y la inspiración de este libro ha sido por demostrar un cachito de vida invivible que se sufre detrás de una sonrisa, un trabajo, la familia entre otros contextos y de ahí la pujanza que tiene la persona para levantarse ante adversidades mentales, ya que, es muy duro el proceso mental y muchos subestiman el estar mal de la cabeza y creo que hay que normalizar las enfermedades y pedir ayuda para superar y sanar”
Publicada en Editorial Círculo Rojo Grupo Editorial va a encontrarse con la historia de una joven llena de luz y vida que tras sufrir una dolorosa pérdida cae en una depresión. A través de los versos de estos versos el lector podrá empatizar con esta enfermedad y ponerse en la piel de la protagonista.
SINOPSIS
Marcas de una sombra es una obra poética inspirada en la penumbra del pasado de una joven que a temprana edad recorrió el camino de la pérdida personal donde los monstruos persiguieron su presente hasta dejarla arrojada en un sillón sin apetito por la vida. A lo largo de la composición de los versos, se encuentra la fragilidad, la etapa de negación, el desamor y el juicio, frente a los obstáculos vividos.
Así mismo, en la poesía de este libro tiene un contraste de la etapa de infancia y adultez, que corrió tras la chica inspirada en los versos. Por consiguiente, en medio de la oscuridad, logró asimilar la guerra perpetua detrás de sábanas, el alcohol, el amor, el desespero y el éxtasis del abatimiento del alma. A su vez, la melancolía no era una opción en su andar, pero el desespero por encontrar la calma era su refugio cada noche en compañía de un café y la luna.
Este libro no solo contempló la soledad a causa de un vacío frenético por la desaparición de alguien cercano, sino la manera de reparar la tristeza y surgir en el llanto; los procesos de aceptación son una forma de encarnar el pasado y agudizar los actos del presente. Por esa razón, la poesía derramada en este libro solicitó ir a la profundidad del dolor humano para interpretar los huecos mentales y la inestabilidad física a partir de la separación del espíritu.