La trama de la obra gira en torno a tres mujeres emigrantes que se encuentran en el país que les da cobijo y cuya amistad les ayudará a sobrevivir a todas las adversidades.
CÍRCULO ROJO.- Raquel Asenjo Dávila se dirige a todos aquellos interesados en las complejidades de las relaciones humanas a través de su nueva novela, ‘El guacamayo’ en la que da voz a la importancia de la empatía y la sororidad entre mujeres. “De este libro destacaría su lectura asequible, ligera, con diálogos ágiles para tratar temas universales unos, como la amistad y el amor fraternal, y otros globales, como la emigración, particularmente vigente en la actualidad”, confiesa ella misma.
Publicada en Círculo Rojo Grupo Editorial, el lector va a encontrarse con tres mujeres emigrantes, Amaya, Antonia y Verónica, que se conocieron en el país de acogida, donde llegaron por motivos distintos, y donde dos de ellas echarán raíces. En la trama central es esencial la sororidad, es decir, la profundidad de la amistad que crece entre ellas, así como el papel de los hijos. El comportamiento de uno de ellos conducirá a un desenlace inesperado.
SINOPSIS
La novela relata las experiencias personales que se desarrollan entre Amaya, Antonia y Verónica, protagonistas principales, mujeres que se conocieron alrededor de los años cincuenta cuando emigraron del País Vasco a la prometedora Venezuela.
Los motivos que las llevaron allí son distintos. Amaya emigra junto a su marido para labrarse un futuro más próspero. Mientras que Antonia se va para apartar la vergüenza de su familia. No solo por haberse casado con quien no era de su categoría, sino, sobre todo, por evitar que sus conocidos vieran crecer su incipiente maternidad. Por su parte, Verónica y su hermano emigraron con su padre, quien pronto regresó a casa con su esposa dejando a los dos jóvenes intentando salir adelante.
En la trama central, el papel de los hijos es fundamental, tanto que, por eso, Amaya y los suyos vuelven a su tierra. Sin embargo, Antonia y Verónica echarán raíces y jamás regresarán.
Destacan sobremanera las tribulaciones de uno de los hijos, cuyas inseguridades, provocadas por verse hasta su adolescencia avergonzado por su padre hacen que no se sienta uno más de la familia. En realidad, el chico añora ser hijo de otros. En su alma se va formando un pozo de resentimiento que precipitará al ser rechazado por la mujer que lo hizo sentirse como un auténtico hombre.
Tal combinado de incomprensión lo arrastra, irremediablemente, a la inestabilidad mental y al alcohol. Y a pesar de contar con el apoyo de su círculo, se comportará como un ser mezquino con quien no lo merece.
Finalmente, confiesa su error a un hermano, que, habiéndolo protegido siempre, permitirá un desenlace inopinado.
AUTORA
Raquel Asenjo Dávila (Salamanca, 1960). Licenciada en Filología Inglesa. Fundamentalmente criada en Bilbao, tras un fascinante periplo infantil en Buchanan, Liberia. Le interesa la temática femenina en todos sus ámbitos, edades y circunstancias. Su trayectoria como docente y su inquietud personal la conducen a publicar con la editorial Círculo Rojo una primera novela: Créeme vas a comerte el mundo; y ahora: El guacamayo.