Historias de una caja de membrillo nos habla de Soledad, una mujer que nos relata su vida y sus recuerdos entre los años 1952 y 1964. Con un lenguaje sencillo, nos trasladamos a aquellos tiempos vividos por Sol, quien nos narra con cariño las dramáticas situaciones que debe sobrellevar por su hija y el apoyo de la buena gente que lo hacen más soportable. Es una novela cargada de emociones y sentimientos, tierna, de amena lectura que engancha al lector entre sus recuerdos, comidas, refranes, sucesos, sus preciadas vecinas y el endemoniado Gustavo. Esa caja metálica de membrillo nos recuerda a esas latas en las que antiguamente se guardaba todo lo que tenía valor: cartas, fotos, joyas, documentos… y que Soledad abraza contra su pecho porque es el recuerdo del pasado, la supervivencia en el presente y el anhelo y necesidad de un futuro mejor que le parece que nunca llega.