CÍRCULO ROJO.- Julián González Lázarode se dirige a todos los paisanos de Acebo y pueblos de la Sierra de Gata a través de las vivencias de su hermano, en su libro ‘Mis recuerdos con Augusto’. “Lo que más destaco de este libro es la integridad y sinceridad de los personajes consultados, el afecto, cariño, agradecimiento y respeto al protagonista”, indica él mismo.
Publicada en Círculo Rojo, Grupo Editorial, el lector va a encontrar, según las palabras del autor, la vida y andanzas de muchas familias extremeñas, la idiosincrasia de un pequeño pueblo, que a través de sus labores de encajes de bolillos, es conocido por casi toda España. La vida de un hombre que supo negociar con los hombres y con Dios”.
SINOPSIS
Parad, señores, por favor. Contemplad, desde aquí, este maravilloso paisaje. Un rico y gran valle formado por dos ríos acebanos: Rivera de Acebo, unido al regato Pedrero y el río que atraviesa el pueblo, el regato del Cahiz, que se convierte en el río de la Lágina. De fondo, a la izquierda, Jálama. Un poco más a la derecha, el teso Porra, también llamado teso del Moro Almanzor. Entre Jálama y el teso Porra, en la hondonada, la cascada de la Cervigona. Siguiendo a la derecha, el pueblo de Gata, con su torre la Almenara fortaleza vigía del medievo. Ladera y valle del bello pueblo, de quien tomó el nombre toda la Sierra. Más escondido, en la siguiente falda, Torre de don Miguel. Pueblo de preclaros hijos, donde residieron mis padres tres o cuatro años, durante mi infancia. A la derecha, en la cima del monte, Santibáñez el Alto. Hermoso pueblo, dentro de una muralla medieval. Desde este lugar, el pueblo parece un ramillete de flores blancas, en medio del gran valle verde. Delante, Villasbuenas de Gata. Cuna de hijosdalgo, de donde salieron varios jóvenes hacia las Américas, entre ellos, el primero de LOS PORORA. El conocido como teso del Moro Almanzor, según la leyenda, fue cruzado por tan heroico guerrero musulmán, en sus numerosas correrías desde el sur del Al Ándalus, hacia Castilla. Es posible que por esos mismos caminos trasladaran las campanas desde Santiago de Compostela hasta la Mezquita de Córdoba a hombros de cristianos. Más tarde, con el gran rey castellano Fernando III el Santo, vueltas a tornar a su sitio de origen, a Santiago de Compostela, esta vez, a hombros de moros. Pero, amigos, no se queden más tiempo. Nos quedan más vistas, tan hermosas, como la que acaban de ver. Prosigan hacia uno de los pueblos más favorecidos por la Naturaleza: Acebo.
AUTOR
Julián González Lázaro (24 de enero de 1939, Acebo, Cáceres) Inició sus estudios en los PP. Claretianos de San Martín de Trevejo. Pasó al seminario de Coria (Cáceres). Realizó el bachillerato de letras en la Casa de las Conchas, Salamanca. Terminó los estudios en la Escuela Normal de Magisterio de Salamanca, 1961. Licenciado en Filosofía y Letras por la Universidad de Granada. Filología Románica, 1977. Ejerció como maestro de primera enseñanza en Calahonda (1966-1967) y Armilla (1967-1978), ambas localidades de la provincia de Granada. Director del colegio público Vázquez de Mella, Madrid (1983-1984 y 1986-1999). Inspector de educación primaria en la Comunidad de Madrid (1999-2009). Presidente de la Comisión de Escolarización de Moncloa – Aravaca – Chamberí – Fuencarral – Moratalaz – Puente de Vallecas – Villa de Vallecas y Cañada Real Galiana. Jubilación: 1 de septiembre de 2009 a los setenta años.