Corría el año 1303. El rey Felipe IV, el Hermoso, de Francia, planeó destruir para siempre la Orden
de los caballeros templarios para hacerse con sus tesoros y propiedades. Pero, para que eso fuera
posible, necesitaba convencer al papa. El gran problema es que el papa actual estaba a favor de los
templarios, ya que obtenía muchas ventajas con ellos. Así que se necesitaba un nuevo pontífice que
se sometiera a las órdenes del rey de Francia. Los templarios, famosos por sus votos de pobreza y
castidad, crecieron en poder y riqueza, lo que preocupó al rey y la nobleza, ya que la tenían poder
suficiente para tomar el poder en Francia por la fuerza. El plan era crear falsas acusaciones de que
los templarios practicaban rituales secretos de magia negra y hechicería, y de que se comportaban
de manera inapropiada con los cristianos, con prácticas sexuales inmorales.
Al mismo tiempo, una sociedad alienígena de humanos del planeta Obeon buscó encontrar
reliquias celtas en la Tierra, que en realidad eran portales interestelares. Sin embargo, un fugitivo
transformado, como se conocía a estos humanos, quería no solo encontrar tales reliquias, sino
también dominar y esclavizar a todos los humanos en la galaxia. Dos caballeros son transportados
a través de este portal al planeta Gorus, junto con la princesa Isabel, hija del rey Felipe IV. En este
planeta encuentran varios reinos alienígenas e increíbles criaturas nunca vistas en la Tierra. Gondor
viaja a través de la corriente del tiempo y se dirige al futuro con Villeneuve y su descendiente, el
joven conde Chabournaut, que vivió en 1896. Hay muchas intrigas y revelaciones sorprendentes
en esta historia ficticia basada en hechos históricos reales.