Maria Daniela Martos i Ballús (Mataró, 1986)
Tras estudiar la carrera de magisterio, descubrí las grandes limitaciones que tiene la docencia para acompañar emocionalmente. Falta de recursos humanos, de espacio, recursos emocionales… Pensé que me gustaría ayudar y acompañar a los niños y niñas desde la raíz. Allí dónde se encuentran las necesidades más vitales y donde se viven las experiencias que forjan las fallas/heridas más profundas. Pero… ¿cómo podría llegar a esas profundidades?
Por aquél entonces ya era madre de mi hija Júlia, que ahora ¡está a las puertas de la mayoría de edad!
Junto con mi proceso terapéutico personal, a través de la terapia morfoanalítica, he podido acompañarla, con consciencia, en todas las fases de su vida. Al tiempo que he podido ir poniendo luz en todas las fases de la mía. Todo un máster para el que… ¡nadie te ofrece un diploma!
Hoy en día, gracias a la profunda formación como terapeuta morfoanalista, desde hace siete años, me dedico a acompañar en su proceso terapéutico a personas adultas que me permiten darles la mano hasta llegar a sus niñas/os interiores. Esos/as niños/as heridos/as ahora pueden ser escuchados, entendidos y sanados. Y con ellos, el adulto en el que habitan.