CÍRCULO ROJO. – Francesc Reina Peral se dedica a escribir desde hace algunos años. Ahora, de la mano de la editorial Círculo Rojo, publica ‘Desde la soledad del banco’, un recorrido de reflexiones que empezó a poner en marcha hace tiempo a partir de tribunas de prensa.
Un libro dedicado a sus familiares y amigos y orientado al movimiento obrero, vecinal y a los grupos universitarios.
Lo que más destaca el autor de la obra es “la temática social, el pensamiento crítico, la justicia y la falta de derechos de los más desheredados. Relatos tristes pero comprometidos, que hurgan en las grietas de la discriminación, reclamando vergüenza para mantener la esperanza, para seguir abrazando las buenas ideas”.
Ha sido la lectura de las personas a las que admira lo que le ha llevado a escribir estas líneas (personas que están citadas en la obra). En sus hojas, se encontrará “una poesía reflexiva, una temática actual como la pobreza, la igualdad o la especulación; la crítica a los abusos”.
SINOPSIS
El tiempo sigue estando hecho de viento para soplar asuntos feos. Este escrito es una caligrafía del ánimo, una geografía desordenada donde se puede apreciar un cruce constante de impresiones alrededor de la normalidad, con todas sus excepciones, antónimos y sinónimos, matices y objeciones, hasta convertirlo en una radiografía repleta de soledades.
Es necesario advertir que estas reflexiones están vertidas en un diario que abre sus hojas una vez a la semana (en un banco, bajo un árbol) para describir la incertidumbre, el desasosiego, el estruendo, la perversión o el fanatismo… Frente a esto: las utopías, las esperanzas, los equilibrios, la honradez, el cuidado, el mutualismo y el bien común…
Pero, sobre todo, es un homenaje a las personas a las que he dedicado mis últimos años de profesión, aquellas que viven en lugares sin nombre pero que siguen llevando sus apellidos a cuestas, como una llave que les permite hacer cosas.
AUTOR
Francesc Reina Peral nació en l’Hospitalet de Llobregat, el suelo con mayor densidad de población de Europa. Como tantos otros de su generación, y a pesar de sus orígenes humildes —de familia obrera—, frecuentó distintas universidades tanto para estudiar como para dar clases: cursó un postgrado y el doctorado; también ha sido docente de masters y postítulos, incluso en las américas; actualmente es profesor y orienta a alumnado en pedagogía social, su especialidad en la UNED. De joven se sintió atraído por la educación de adultos de la mano de su profesorado, y comenzó a dar clases a expresidiarios; a finales de los setenta fue maestro en un aula unitaria del Colegio Popular Asambleario fruto de las reivindicaciones del movimiento vecinal entre Badalona y Sta. Coloma, y que más tarde digirió. Junto al grupo con quien comparte vocaciones, mantuvo su compromiso con el sector asociativo y vecinal desde la animación sociocultural (1ª maratón infantil, 1ª subasta popular, primer cabaret vecinal, 1ª arrozada nocturna) y la educación en el tiempo libre; crearon el grupo musical infantil Cel Obert y el centro de educación de tiempo libre La Gatzara, al tiempo que prestaba su labor profesional en los servicios de ayuda municipal. En las últimas décadas lo compagina con actividades y estudios sobre la paz y los derechos humanos, tanto aquí como en la órbita de la cooperación internacional, a través de la mediación y otras formas de gestión de conflictos. Combina estas con su afición a la literatura (ha publicado con Averso un poemario: La casa Amarilla) y la música (ofrece tributos con su grupo Branca a grandes cantautores de aquí y de allá).