Un encargo… un libro, el cual se convierte en la razón de las razones y pone patas arriba el particular universo de un alma solitaria, un alma para quien, hasta ese momento, la vida había pasado al igual que si fuese un mal sueño… Así arranca esta trama llena de historias en la que todo, absolutamente todo, está relacionado. Luis Laguna Sampere, nuestro circunstancial «escribano», desde la lógica inseguridad de alguien que carece de habilidades sociales, nos contará los detalles en forma de «diario de a bordo», al no haber encontrado una mejor manera de armar el puzle que debe mostrarnos. Y tú, lector, no tendrás más remedio que perderte a través de los recovecos de su desbordada imaginación, si quieres entrever los mensajes ocultos que nos irá proponiendo; solo de este modo conseguirás desentrañar los misterios. Por el camino, te toparás con un montón de encuentros y desencuentros, de viajes paralelos al tuyo y, ante todo, con casualidades, muchas casualidades, aunque quizá no se trate de eso… de sucesos casuales… Puede que los acontecimientos que nos presenta el bueno de Luis hayan sido previamente urdidos en una densa y enmarañada tela. Puede que tú mismo estés leyendo esta novela por algo que se escapa a los límites de tu propio entendimiento.