La obra gira en torno a la vida de Leo, doctor en Filosofía y Letras, y su familia. Nacido en el entorno rural de una localidad del Maestrazgo turolense, sin apenas comodidades hace pocas décadas, el filósofo glosa el progreso que ha traído siempre, a lo largo de la historia, grandes adelantos para la humanidad. La vida media de la persona ha crecido notablemente y el trabajador ha mejorado mucho sus condiciones laborales. A su vez, esto ha posibilitado la adquisición de cultura a todas las capas del estrato social de los países desarrollados.
El libro describe el aporte de las civilizaciones antiguas (mesopotámica, fenicia, china, egipcia, griega, romana, árabe y latinoamericanas), la grandeza de las revoluciones industriales y el espectacular avance en la era exponencial de nuestros días. Sin embargo, muestra su preocupación sobre este progreso desmedido, sin control, que puede tornarse peligroso.
La obra muestra, a través de la vida de Leo y de varios expertos en diversas materias (ciencias políticas, drones, ingenierías, medicina, virólogos, investigadores en inteligencia artificial y cambio climático), la preocupación por el futuro de un mundo global con enormes necesidades que conlleva escasez de materias primas, serios problemas energéticos y la modificación del clima.
Extrae conclusiones sobre la ignorancia humana, pese al gran progreso logrado, la pérdida de valores en la familia y la sociedad, la disminución de calidad en los centros educativos y la falta de preparación de la clase política. Además de otras amenazas palpables de nuestra civilización: pandemias, población envejecida en los países desarrollados, degradación moral, enfermedades transmitidas por animales silvestres, bioterrorismo y peligrosidad por el mal uso de las nuevas tecnologías.
Alerta sobre una parte de la humanidad instalada en el buenísimo, la estupidez y el complejo. Una sociedad donde muchas veces la persona honesta es perdedora, ya que la honradez se convierte en autosacrificio y la corrupción en recompensa.
En el contenido de la obra, la vida de Leo transcurre por las bellas comarcas del Maestrazgo y Matarraña, en la provincia de Teruel, los parajes atractivos de Perú y México de las culturas latinoamericanas, Nueva York, Zaragoza, Cudillero, Madrid, Egipto y otros lugares donde dejaron importantes legados las antiguas culturas.