“Mi vida está bañada por momentos que, de un modo directo o indirecto, están ligados al trabajo que realizo, a la educación; y a mi pasión por conocer las culturas del mundo en que vivimos. Podría por tanto decir que todo aquello que me ha conformado como maestro es todo aquello que me apasiona en la vida personal, enseñar a los alumnos/as y viajar. Y he de decir que a veces la línea entre ambas pasiones se difumina o se concreta, como lo queramos ver, por ejemplo, a través de la participación en proyectos educativos europeos, de los cuales he aprendido cómo se establece la educación en los países de nuestro entorno.
Las ideas y experiencias que nos enriquecen deberían ser compartidas si queremos aportar algo positivo a la sociedad y en concreto a la educación. Durante estos años de experiencia laboral y de formación, entiendo que la buena práctica educativa viene siempre refrendada por un trabajo en equipo. En este sentido, el trabajo colaborativo es indispensable para afrontar los retos de la educación del siglo XXI.”