Marcos de Andrés Ortega (Segovia, 1997), estudiante de Trabajo Social en la Universidad Complutense de Madrid, y del Grado de Psicología en la Universidad Nacional de Educación a Distancia, fue criado desde pequeño con la implacable curiosidad del saber, acérrimo devoto del sumirse en ámbitos sociopolíticos, psicológicos, neurológicos, flosófcos y lingüísticos; siendo así, los susodichos campos, la índole más recurrente en su inspiración. Como él mismo aduce, su musa son los saberes y las vivencias intrínsecas que adentro han hecho mella y han calado hondo. Su personalidad no es más que producto de la minuciosa forja del tiempo, de las relaciones, del bagaje y la memoria. Su escritura, un confortable derrotero por donde escapar de la distemia, una compañera inseparable a la que aferrarse cada vez que farfullan sus tripas.