Aram Öltz pronto cumplirá 18 años. Es kurdo y musulmán. Asiste en una mezquita de Madrid a la oración del viernes, la Yihad Santa es el eje de la prédica incendiaria de un imam salafista, destinada a conseguir el reclutamiento de nuevos mártires para el Dáesh. Prédica que cae en terreno abonado: los padres de Aram murieron víctimas de la brutal represión del ejército turco contra los kurdos el 21 de marzo de 1992, día conocido como el Newruz Sangriento, cuando cumplía seis años. Su deseo de venganza le empuja a seguir al imam hasta Alicante para enrolarse en el Ejército del Califato. Pero en su camino se cruzarán el Embajador de Turquía en España; un hashashin y las Fiestas de Moros y Cristianos de Sax, en honor de San Blas. «Como sajeño, es de justicia agradecer al autor el cariño demostrado a nuestro pueblo, y que ha transmitido maravillosamente en sus páginas, y como lector, mi felicitación por aflorarme la sonrisa en muchas ocasiones, y conseguir que broten las lágrimas en otros capítulos de gran intensidad dramática». Vicente Vázquez Hernández.