Cuenta la leyenda que en la Fuente de los Moros, en el hueco lateral derecho, hay un pasadizo por el que los moros bajaban desde el castillo hasta la fuente Esto fue lo que ”Luisa” ¡Creyó !. Arrastro a “Oña” a encontrar lo que nunca pensaron que encontrarían. Les unía de por vida una leyenda y la guerra civil de 1936 se interpuso entre las dos, como en miles de familias y amigos,
Oña siguió el curso de la guerra y Luisa tras la misma el de la emigración, Ninguna de ella se olvidó de la otra. Siguieron caminos diferentes hasta que el duende del destino las unió en el
final de los sueños de Luisa. Encontrarte una leyenda no te lleva a la felicidad, puesto que la mayoría de ellas surgen de la idiosincrasia de sus peores actos. Esta es su historia. Unida por un cordón invisible que ato sus recuerdos de por vida. Lo que pudo ser un castillo de sueños perpetuos, la guerra civil venida con los vientos(siroco) del sur se lo llevo por delante..