“Todos los humanos albergamos en nuestro interior una semilla de valentía, coraje y de servicio a los demás. De nosotros depende cultivarla y regarla cada día o, simplemente, quedarnos quietos y ver como se seca.”.
En una sociedad y sistema educativo en donde prima la información y la acumulación de datos, quizás nos estamos olvidado de educar a través de los planteamientos internos, valores éticos y del sentido común sobre qué es lo que queremos enseñar, cómo queremos hacerlo y qué pretendemos con ello.
Resulta obvio que aprender a leer, hacer operaciones básicas, obtener conocimientos generales o aprender protocolos básicos de educación es algo muy necesario para formar a los menores; pero no hemos de olvidar la siguiente pregunta: ¿de qué le sirve a un niño o adulto saber mucho o aparentar ser muy correcto si no se auto-respeta ni siente empatía hacia los demás?
Para poder sobrepasar el muro de lo establecido y otear nuevos horizontes, es preciso adentrarse en una serie de temáticas de interés educativo y humano que vayan más allá del “libro y los deberes”, con la intención de recorrer sin temor ni evasivas asuntos vitales para algo que no pasa de moda y que todo el mundo quiere: ser el dueño de su propia felicidad.
En tales temáticas, el amable lector podrá obtener una amplia información
objetiva y científica, acompañada de algunas experiencias vividas por un servidor, en donde se desarrollarán aspectos como la psicología educativa, la sociología del consumo, la salud integral del ser humano, el enfoque equilibrado de las nuevas tecnologías, la educación emocional, las causas de algunas adicciones junto a sus mecanismos de prevención, cómo abordar la sexualidad con los menores, cómo educar en el respeto al medio ambiente, y un largo etc.
Educar con valentía es un libro dirigido a todo padre y madre, docente y persona autocrítica que esté dispuesta a educar partiendo de su propio ejemplo, pues como alguien dijo “La mente no olvida lo que el corazón recuerda”.