Mirian es una joven dulce, feliz y soñadora, que se encuentra en la difícil tesitura de qué hacer con su vida. Son momentos difíciles, en los que su alma libre choca frontalmente con la vida que en su entorno dibujan para ella. Aun así, el temor a defraudar a sus seres queridos la hacen decantarse por un mundo que no es el suyo. Un mundo que la oprime, en el que se siente enjaulada y con el que no se identifica.
A pesar de los continuos intentos de la joven de permanecer fiel a los deseos de su familia, los dictados de su corazón son demasiado poderosos y la arman del valor necesario para evitar que siga viviendo presa de los deseos ajenos. Así es como hace frente a su núcleo familiar, así es como se libera de las esposas de las que era prisionera.
Sin embargo, el camino no resulta nada fácil, pues no encuentra la manera de llenar el vacío provocado por el abandono de su antigua vida. Sin duda, se trata de un cambio necesario, pero al mismo tiempo complicado. Un camino lleno de incógnitas, de miedos y de dificultades, pero que conforme las va superando, la hacen crecer como persona.
Es en mitad de ese laberinto de dudas en el que aparece en su vida Fabio, un apuesto y decidido agente de policía que, con el paso de los días, va desgranando a Mirian, los entresijos de la organización y del trabajo policial, haciendo que la joven se sienta profundamente atraída tanto por él como por las funciones policiales. La labor policial en tentativas de suicidio, en grandes incendios, la lucha contra las organizaciones delincuenciales, la detención de agresores sexuales y la búsqueda de peligrosos atracadores, entre otras, son solo algunas de las investigaciones que logran seducir a la joven en su decisión de ser policía.
A partir de ese momento, nuestra protagonista comienza una nueva aventura, cargada de ilusión, de dudas y de superación. Aventura en la que es acompañada y asesorada por el joven policía y en la que será su actitud ante dicho desafío la que marque su destino.