Este poemario es un vómito de realidad. Un viaje por el safari emocional de la autora, plasmado a través de setenta micropoemas. Lectoras y lectores se adentrarán en un mapa de versos que aborda, por un lado, la cara más oscura del fracaso —culpa, desilusión, ira—; y por otro, el alivio transitorio que ofrecen los refugios hallados en el camino —vicios, música, soledad—. Todo ello planteado desde una perspectiva que sitúa al sistema capitalista de la sociedad de la (des)información como condicionante de las carencias emocionales de las personas y abordado a través de juegos de metáforas
que parten del concepto de modernidad líquida y de la inmediatez de la comunicación actual.
El propósito final de estas memorias animales es poner voz a todo aquello que permanece oculto tras las púas del erizo. Visibilizar emociones que viven atrapadas en la letra pequeña de la humanidad. Acompañemos a la autora en esta visión de los sentimientos que dormitan tan dentro de nosotras y nosotros mismos.