Un niño en pleno descubrimiento de sí mismo. Le acompañan el miedo y la incertidumbre por saberse diferente, así como la madurez precoz para analizarlo de forma descarnada e hiriente.
Entre la oscuridad de la angustia adolescente, él: un com-pleto desconocido que, mediante la fantasía y la idealización, se convertirá en un salvavidas contra la soledad y en el reluciente espejo de sus anhelos más secretos.
Todos juegan al fútbol, pero él prefiere el baloncesto es la primera novela de Jonathan Bang.
Basada en una experiencia real, y narrada de forma onírica y poética, pero sin dejar de lado el humor, en sus páginas se abor-dan entre otras cuestiones, el miedo a la soledad, la impotencia frente a la injusticia, la construcción de la identidad y la acepta-ción de uno mismo.
El descubrimiento del amor y el entorno asfixiante de la familia y la escuela dan forma a un relato con el que se identifica-rán todos aquellos que, fuera de los estereotipos imperantes, formaron parte de una sociedad no preparada para responder a sus preguntas incómodas.