Una organización satánica criminal denominada el Club del Círculo del fuego aspira a montar una base de acopio y distribución de droga, armas, medicamentos falsificados y tráfico de personas en Gambote, un pueblo de la costa norte de un país sudamericano. Descubren que el sitio estratégico para montar esta base (un moderno puerto marítimo) es precisamente en donde está El Castillo, la casa de los Benítez, por lo que es preciso hacerse al mismo para montar este puerto. Para lograrlo, deben primero desalojar a la familia, y para alcanzar este objetivo, harán cual-quier cosa. Pero eso no es sencillo. Esta casa pertenece a la más pura tradición de los Benítez y ellos —que desconocen por completo la existencia del Club y sus propósitos— no están dispuestos a abandonar la casa. Benancio Benítez, padre de Granciano (nuestro protagonista principal), es el único que sabe de estos propósitos (de la venta de la casa, mas no de la base), ya que le han propuesto comprarle la casa a buen precio, pero ha perdido la memoria. Granciano, por su parte, trabaja en el comercio exterior y en la clarividencia.