CÍRCULO ROJO.- ‘El ayer y el hoy’ está escrito bajo los cimientos de una felicidad truncada por el destino. De una pérdida desoladora. De un sufrimiento que C. Rubio ha utilizado como motor para escribir este libro. Asegura que no sabe el público al que se dirige, ya que cualquier persona que haya vivido una experiencia traumática podría llegar a entenderlo. Es un soplo de esperanza para todos aquellos que sienten las penurias que la vida va poniendo en el camino. Y en especial es un recordatorio de lo importante que es vivir el presente.
Al igual que la protagonista de esta historia, el tiempo va pasando para todos. Los lectores se pueden sentir identificados con ella porque a medida que vive, las situaciones, tanto buenas como malas, llaman a su puerta. Hay que saber sobreponerse a esa fuerza que muchas veces no se puede dominar, el destino.
Rubio explica que escribir le otorga “un remanso de paz”. Y utiliza estas líneas para dejar el mensaje de lo efímero que es la felicidad cuando la tienes, por ello, sin duda, hay que aprovecharla.
SINOPSIS
Es la historia de una mujer a través del tiempo. Mientras es joven, todo le sonríe. Cuando llega a la edad adulta encuentra la felicidad completa con el hombre que ama y que la ama. Pero el tiempo, que nunca se detiene, va mostrándole las aristas que la vida tiene reservadas para ella. Aristas por dentro y por fuera, hasta enseñarle la cara oculta del que será su destino, que nunca es el que ella esperaba. Así va transcurriendo una larga existencia en la que hay de todo, pero en la que predomina la felicidad y la creencia de que nada ni nadie se la puede robar. Pero la vida no siempre es justa y tristemente descubre que sí, que en un momento todo se puede truncar, que no puedes mandar en tu vida, aunque sea tuya, porque las normas no las pones tú, sino el destino. Así, lo que antes era alegría en un momento dado se convierte en tristeza, soledad, desengaño y, sobre todo, en el pensamiento de que «esto no es lo que esperaba».
AUTORA
Se llama Carmen Rubio y tiene 73 años. Por circunstancias familiares, no pudo asistir a la escuela. A los 46 años aprendió a escribir en escuelas nocturnas, a las que asistía después de la jornada laboral, hasta conseguir el graduado escolar y más tarde la enseñanza secundaria más el título de auxiliar clínico.
Está casada y tenía dos hijos, pero hace tres años perdió a su hija. Desde entonces, escribir ha sido como un remanso para ella; o lloraba o escribía. Antes, leer era su pasión, ahora divide el tiempo entre escribir y leer.
Como escritores preferidos tiene a Fernando Aramburu y José Saramago (españoles); Auður Ava Ólafsdóttir, William Faulkner, Natalia Ginzburg, entre otros (extranjeros).
Hasta ahora, este es el tercer libro que publica con la editorial Círculo Rojo.
Aunque vive en Tordera (Barcelona) desde los seis años, nació en Uleila del Campo (Almería).
