CÍRCULO ROJO.- La principal motivación de Concepción Robledillo Guerrero para escribir ‘El camino’ fue acompañar a sus compañeras de quimio terapia y superar el miedo y la incertidumbre que supone la llegada del cáncer. “Destacaría el sentimiento sincero que hay entre sus páginas, los mensajes de superación, su lenguaje fácil y directo. Pero ante todo, el propósito solidario por el que fue escrito”, añade ella misma.
Publicada en Círculo Rojo Grupo Editorial, el lector va a encontrar una obra ideada para que el lector no se sienta abrumado. Así, la autora divide la obra en diferentes partes en las que invita a sus lectores a superarse en todos los ámbitos. “Esta obra es un canto a la solidaridad, a la empatía y al amor”, tal y como explica su autora.
SINOPSIS
El camino es el reflejo de la sencillez y complejidad de la vida; con sus miedos, dudas, injusticias, sueños y retos.
Todo ello, sin olvidar el que debería ser el motor del mundo, “el amor”.
Poemas llenos de vida, ilusión y sentimientos; acompañados de sublimes mensajes de superación e invitación a la empatía y solidaridad del ser humano.
En esta cautivadora obra, la autora deja entrever su alma, desnudando su corazón, en cada verso y poema.
El camino es la continuación de “el Despertar” el 1° libro solidario a favor de la lucha contra el cáncer. Ambos forman parte de la trilogía ” La vida en versos y poemas”. Un trabajo que nació del miedo, las ganas de luchar en pro de la vida y la necesidad de superación.
AUTORA
Concepción Robledillo Guerrero nació en Huesa, un pueblecito de Jaén, en el seno de una familia humilde y trabajadora. Siendo la única chica de cinco hermanos, creció en el ambiente machista de aquellos años y desde bien niña debió compaginar las tareas del hogar con el trabajo del campo y los estudios; despertando así en ella una voz interior que
se rebelaba contra las injusticias de la vida que le tocó vivir; fue transformando en poemas los sentimientos y emociones contenidas, desahogando en el papel la impotencia que no podía transmitir en palabras. En su temprana adolescencia, los versos de Gustavo Adolfo Bécquer la ayudaron a abrir sus ojos al amor y desde ese momento el contenido de sus letras se vio diversificado. Escribió a la tierra, a las injusticias, al amor y a todo cuanto se cruzaba en su camino. A la edad de diecisiete años, decide trasladarse a Cataluña para labrar su futuro, dejando un poco aparcada su afición. El verano del 2013, el destino le jugó una mala pasada, truncando su futuro con un fatal pronóstico: «cáncer». Desde ese día, debe enfrentarse a un futuro incierto, y una vez más necesita refugiarse en su afición y amor por la poesía, que la salva de nuevo de sus peores momentos. Durante esa dura etapa de su vida, se siente muy vulnerable y a la vez más solidaria que nunca, y decide crear un blog de poemas donde plasmar la vida y el amor hacia esta, además de llevar a cabo un buen propósito: ayudar a otras personas que pasen por la misma experiencia o cualquier otra similar. Así nació la idea de publicar su primer libro solidario, al que tituló El despertar.
Tras la maravillosa y grata