CÍRCULO ROJO.- La literatura contemporánea española se enriquece con la llegada de “El poder falso de un momento de imagen fugaz”, la obra más reciente de José Antonio Lara, publicada bajo el sello de Editorial Círculo Rojo. Esta obra invita a una reflexión crítica sobre la Historia y las relaciones humanas, ahondando en las estructuras sociales y cómo estas afectan la supervivencia y evolución de las personas.
Lara, escritor desde la infancia y docente en artes plásticas e Historia, ha dedicado un año a la elaboración de este texto que surge como una necesidad personal, impulsada por las experiencias vividas en el último lustro. En sus páginas, el autor presenta un análisis dialéctico de su conocimiento y vivencias, creando una obra que desafía las convenciones establecidas sobre la Historia y su interpretación.
Lejos de limitarse a un público académico o especializado, “El poder falso de un momento de imagen fugaz” está dirigido a cualquier lector interesado en comprender las complejidades de la condición humana. Con un enfoque filosófico y antropológico, Lara aborda los cambios socioculturales que marcan el devenir de la Historia, dejando preguntas abiertas sobre el papel del individuo en la construcción de su propia realidad.
El libro destaca por su capacidad de entrelazar teoría y práctica en una narrativa que invita a la introspección y el debate. Lara cuestiona los modelos concebidos para el estudio de la Historia y propone una nueva forma de entender las transformaciones sociales desde una perspectiva crítica.
Con una presentación cuidada y respaldada por Editorial Círculo Rojo, esta obra ya está disponible en librerías y plataformas digitales. Para los amantes del pensamiento profundo y la literatura que desafía el status quo, “El poder falso de un momento de imagen fugaz” promete ser una lectura imprescindible en 2025.
SINOPSIS
El texto que aquí se presenta, afortunadamente o no para el lector, es fruto de un año de investigación y obcecación. Hemos intentado fundamentar cada una de las secciones que en él aparecen, así como tratar cuidadosamente cada voz o sintagma. Sobre todo porque consideramos que nuestras explicaciones y verbalizaciones tienen un contenido distinto, cultural en todo caso; compatible o incompatible con nuestra propia historia vivida (que, claramente, debe concebirse), pero también con la que «es» para su concepción.
Y esta, quizá de un modo tétrico, se aleja de lo que concebimos, a la par, científica y mundanamente; también lo hace ante el avance de cada paso que se da y de cada factura que hay que entender. Incide, por lo tanto, de maneras diversas en las relaciones humanas y no humanas que compartimos y afrontamos.
La tarea de ser crítico con la historia que es concebida (sea en su forma de creación propagandística o en forma de habladuría de campanario), y que, ya personalmente, confieso que no he intentado, en la mayoría de las ocasiones y mientras he podido, asimilar o acomodar (como se diría en el aula de formación del profesorado), me ha ayudado a escribir este escueto libro.
El contenido del mismo tiene mucho más que ver con el indispensable análisis dialéctico de las ideas que, indudablemente, puede orientar la interpretación del pasado, presente y futuro (a lo práctico), y no a los individuos en sí, en su sentido amplio. Y, sobre todo, con el trabajo en la realidad. Aquella en la que pertenece el ser humano que transita hacia su empleo, instituto, universidad o supermercado de confianza más cercano y que, en su camino hacia la cabina de vigilancia de la fábrica, se encontrará y soportará, progresivamente, y atado al mástil, como Ulises, los cánticos de las sirenas o tritones de la vida.
Mi genuflexión hacia estas personas, que espero que de un modo u otro puedan superar su siguiente día.
Mis agradecimientos a todos los que han contribuido al contenido y estructura de El poder (hacer) falso en un momento de imagen fugaz.
AUTOR
José Antonio Lara (Barcelona, 1995).
He podido formarme y todavía sigo en la línea. Los antiguos de la paidea decían que hasta la treintena había que hacerlo. Pues aquí estamos, y ojalá pueda seguir haciéndolo. Poco más tengo que decir de mí. Lo importante es poder hacer sin perjudicar a otros seres obradores que me circundan o que circundo. Me determino con las buenas obras para intentar aportar obras buenas.