Tras una larga experiencia profesional, Hendrik, aborda las emociones de niños y padres con el fin de ayudarles a entenderse mejor y a mejorar su relación filial.
CÍRCULO ROJO.- Tener un hijo es una de las grandes aventuras de la vida. Aquellos que ya se han adentrado en el mundo de la paternidad entienden esto que describimos. El caso de Hendrik Vaneeckhaute, quien además de ser padre de dos hijas y un hijo, lleva años trabajando con padres e hijos. Es por eso que tras la publicación de su primer libro en el que aborda el tema de los celos entre hermanos, se ha decidido a publicar: ‘¡Mi mamá no me entiende!¡Yo tampoco!’
Publicada en Círculo Rojo Grupo Editorial, el lector va a encontrar un libro que le ayudará a entender lo que pasa por la mente de sus hijos y a comprender las emociones que siente él mismo, ya que como explica desde su experiencia como padre, “la parte más difícil en la crianza de mis hijos ha sido la gestión emocional, tanto la mía propia como las de mis hijos. Nada ni nadie me ha alterado tanto, ni han confrontado tanto con mi forma de ser que la crianza de mis hijas e hijo”.
‘¡Mi mamá no me entiende!¡Yo tampoco!’ no contiene la receta perfecta para educar, eso no sería efectivo, puesto que cada niño al igual que los adultos, es diferente, sino que es un libro destinado a fomentar la empatía con el fin de acompañar la educación y crianza de los niños de forma más respetuosa.
“Como profesional, veo que el acompañamiento emocional de las criaturas es crucial para su desarrollo. Las vivencias emocionales en los primeros años de vida marcan mucho el carácter de las personas, su autoestima, su forma de relacionarse con el mundo. A pesar de la atención que existe sobre el tema, sigue siendo algo que no se trata de forma adecuada”, sentencia Hendrik Vaneeckhaute.
SINOPSIS
Las emociones …
Probablemente nunca antes en la historia se ha prestado tanta atención a las emociones de las criaturas, un nuevo camino por el cual parece que a veces nos perdemos. Algunas personas defienden la disciplina y la autoridad, otras lo abordan desde en un laissez faire, un dejar hacer, en el cual las criaturas crecen sin los límites adecuados. Las dos posiciones, por muy contradictorias que parezcan, llegan al mismo sitio: niños/as desconectados/as del adulto, incapaces de conectar de una forma consciente con sus emociones; incapaces, por ejemplo, de conectar y permitir el enfado sin tener la necesidad de bloquearlo, o de desbordarse. Niños y niñas que se convierten en adultos/as que no pueden gestionar su enfado, y a su vez no lo pueden permitir en la criatura, o, al contrario, no lo pueden contener, y la criatura se pierde sin referencias de cómo expresarlo.
Miedo, alegría, tristeza y enfado, cuatro emociones básicas y cruciales en el proceso de crianza y educación. El autor explica de forma sencilla, pero concisa, la importancia del acompañamiento adecuado para que estas emociones (y sus variantes y combinaciones), se conviertan en elementos positivos que ayuden a las criaturas en sus procesos de crecimiento.
Ser felices no es más que ser conscientes del equilibrio interior.
No existen emociones negativas, ya que las emociones nos ayudan a equilibrarnos y ser conscientes de lo que necesitamos para superar las circunstancias que los provocan. Desde la dependencia absoluta, las criaturas poco a poco van conquistando su autonomía. Crucial en este proceso es la regulación emocional que viven a través del adulto cuidador. Para eso necesitan de adultos empáticos, capaces de permitir y acompañar la expresión emocional de los niños y las niñas.
Partiendo de la experiencia personal y profesional, con muchos ejemplos prácticos, el libro nos adentra en el mundo de las emociones en la crianza y educación.
La empatía del adulto cuidador permite a la criatura vivir momentos de sentir la plena aceptación.
Soy, y es suficiente.
AUTOR
Hendrik Vaneeckhaute es psicomotricista relacional y especialista en prevención y salud infantil. Trabaja en diferentes escuelas y en su centro de psicomotricidad relacional, en movimiento.
Es formador de m/padres y profesionales que trabajan con niños y niñas, conferenciante y autor de diferentes artículos y textos sobre la crianza y educación (disponibles en su web, www.emo.bio).
Ha sido acompañante y cofundador del Espai per a Créixer La Serrada en Alcoi, espacio de juego y socialización activo y vivo creado en el 2006. Anteriormente, en Bélgica, ha trabajado como profesor en la ESO y Escuela Técnica Superior.
Ha sido voluntario con la organización Brigadas Internacional de Paz, en Colombia, brindando acompañamiento protectivo a defensores de derechos humanos y comunidades amenazadas. Ha trabajado como coordinador europeo dentro del mismo proyecto.
Es padre de dos hijas de 15 y 17 años y un hijo de 10 años.