CÍRCULO ROJO.- El propio Miguel Ángel Salinas reconoce que no es una obra apta para adolescentes, pero sí para “el resto de los mortales”. “El lenguaje utilizado a posta para la narración, totalmente coloquial, es fundamental para facilitar una aproximación con el lector. La manera de entender la noche, la diversión, la relación de pareja y la vida misma resultan muy próximas para muchos. Comprendo que a según quién se le escape una trama tan propia de Tarantino y considere los hechos como pura fantasía. Pero como digo en alguna parte, «esto le podía haber pasado a cualquiera, aunque para eso se debería de parecer un pelín a Charly»”, explica él mismo.
En ‘Corre Pollo, Corre’, el lector va a encontrar, según las palabras del autor, “una novela de barrio, de narcotráfico, de amistad, de asesinatos, de apego a la vida. El hilo conductor del relato son las drogas. Los cuatro amigos consumen coca, acuden a los mismos bares, les gusta la misma música y comparten la misma manera de disfrutar la noche. Charly, especialista en meterse en líos, se ve envuelto en un asunto turbio con un traficante (pierde medio kilo de coca). Su insensatez salpica, una vez más, las calmadas y organizadas vidas de sus amigos, hasta tal punto de ponerlas en peligro”.
OPINIÓN DE MEDIOS
«Su empeño es admirable. ¿Qué lo anima a seguir, a pesar de fracaso tras fracaso?»
Mondadori de risa
«Toda una lección de humildad: reconoce sus limitaciones (y no solo las físicas).»
Corriere della que será será
«Un relato al que hay que sobrevivir.»
Pearson de Molina
«Fallecí antes de que se publicase. No lo pude leer, lo siento.»
Grupo editorial Los Planetas
«Soy el editor más estúpido que conozco. Le dije que sí varias veces.»
Editorial Mandanga de la Buena
«En línea recta, sin salirse del círculo.»
Penguin Random Orchestra
AUTOR
Lo habitual es indicar año y lugar de nacimiento, actividad profesional, estudios cursados, méritos, premios y demás zarandajas. Sin que sirva de precedente, dejaré caer que nací en Barbastro un día tormentoso del mes de agosto. Mi madre no lo olvidará jamás (y no por la tormenta).
El resto podrían consultarlo en la Wikipedia, pero, desafortunadamente, no alcanzo la notoriedad suficiente como para ser glosado en su infinita sapiencia. Puestos a reseñar lo sustancial, debo de remarcar que, mientras escribo estas líneas, permanezco vivo; cuando lean esto, puede que no, tal y como está el patio… Premios no he obtenido ninguno, ya se lo adelanto, más bien castigos. Y mi obra literaria es tan extensa como el firmamento infinito y estrellado, aunque la mayor parte inédita. ¿Por qué? Pregunten a los editores.
De todos modos, no creo que les interese conocer acerca de un servidor. Mi vida, insípida y anodina, les aburriría. Sin conocerles, seguro que es más interesante la suya. ¿Que qué sabré yo? Poco tirando a nada. Yo me preocupo de lo mío, que bastante tengo.
Me atrevería a aconsejarles, con el recato y respeto que merecen, que lean el libro. En cada una de las páginas, ya sea de modo encriptado o vehemente, les haré compañía. Juntos de la mano alcanzaremos el final y entonces, justo entonces, me darán la razón. Todo lo que necesitaban saber sobre mí lo habrán leído.
Qué experiencia tan hermosa. ¿No les parece?