CÍRCULO ROJO.- La escritora Marisa Padilla Zagalaz regresa a las librerías con Paisaje teñido de gris, su quinta novela, publicada bajo el sello de Editorial Círculo Rojo. En esta obra, la autora nos sumerge en la España de la posguerra a través de los ojos de una niña de diez años que, sin darse cuenta, se ve arrastrada por las heridas abiertas de su pueblo, donde vencedores y vencidos conviven en un frágil equilibrio.
La novela nos presenta la transformación de la protagonista, quien, al descubrir los miedos y resentimientos de sus paisanos, deja atrás la inocencia infantil para enfrentarse a una realidad compleja y dolorosa. A medida que la historia avanza, su mirada ingenua se tiñe de matices oscuros, convirtiéndose en testigo de las cicatrices de una nación dividida.
“La pregunta que me motivó a escribir esta historia fue: ¿cómo consiguieron convivir, tras la Guerra Civil, los dos bandos en pueblos pequeños donde todos se conocían?”, explica la autora. Desde este planteamiento, Padilla Zagalaz construye una narración llena de matices, en la que las ideologías se diluyen en favor de una exploración más humana de la memoria y la convivencia.
La obra se dirige a lectores que buscan entender los matices de la historia sin caer en discursos radicales. Paisaje teñido de gris no pretende imponer verdades absolutas, sino invitar a la reflexión sobre los silencios, los secretos y las cicatrices que dejaron aquellos tiempos.
Marisa Padilla Zagalaz inició su andadura literaria hace dos décadas y ha consolidado una trayectoria marcada por su interés en la memoria y la identidad. Con Paisaje teñido de gris, la autora se consolida como una narradora sensible y profunda, capaz de dar voz a aquellos que nunca pudieron contar su historia.
SINOPSIS
Paisaje teñido de gris habla de la oscuridad que cubrió a España al término de la Guerra Civil. Lejos de restañar las heridas de la etapa anterior, el régimen surgido de la victoria estableció una férrea dictadura, vengativa con los vencidos e impositiva con el resto de la sociedad.
Esta novela habla de un tiempo difícil, donde los provenientes de uno y otro bando tuvieron que aprender a vivir juntos de nuevo, superando la desconfianza, el odio o la venganza por los hechos ocurridos en la etapa anterior, algo difícil de lograr en los pueblos pequeños, donde todos se conocían y todos eran sabedores del comportamiento que cada cual había tenido años atrás. No todos supieron actuar con propósitos de concordia. Hubo quien optó por la revancha, quien se aprovechó de su cuota de poder o quien se negó a reconocer la derrota, originando un magma compuesto de miedo y rencor que flotaba por debajo de la capa social. Toda esa podredumbre irá siendo desvelada por María, una niña cuya curiosidad la lleva a descubrir las incoherencias, las mentiras y los secretos que acompañan a los adultos, lo que acaba con su ingenuidad, llevándola a madurar prematuramente y a replantearse en qué lado de esa sociedad dividida debe situarse.
AUTORA
Marisa Padilla Zagalaz nace en Bailén (Jaén), pero pasa su infancia y adolescencia en Argamasilla de Alba (Ciudad Real). Terminado el bachillerato, se marcha a Granada, donde estudia Filosofía y Letras, licenciándose en la rama de Historias. Desde entonces, su vinculación con el pueblo que la vio crecer es escasa. Una vez jubilada, se instala en Argamasilla, y entonces trata de enmendar su desapego anterior convirtiendo a ese pueblo manchego en protagonista de algunas de sus novelas, una de ellas es Paisaje teñido de gris.
Escribe su primera novela sin habérselo planteado, como resultado de una terapia necesaria; nace así El mirador interior, en 2006. Es entonces cuando descubre su pasión por la escritura y continúa escribiendo: La encantada, La mujer del acantilado, El espejo y la máscara y diversos relatos.