Título: Siete. Sobre los vicios y sus escenarios capitales.
Fecha de publicación: julio de 2022
Autor: Juan González González
Editorial Círculo Rojo
Disponible en Amazon y en librerías
Son numerosos los momentos de nuestro día a día en los que los pecados capitales están
presentes. ¿Fueron un referente moral y ético en las sociedades pasadas? ¿Lo siguen siendo en la actualidad?
Juan González ha realizado una difícil tarea: plasmar mediante sesenta imágenes la evolución y presencia de estas siete categorías y cómo se han expresado y evolucionado a lo largo de los años.
Una obra que trata de visibilizar la identificación y definición de los pecados capitales a
través de su historia y su fluida evolución desde diferentes puntos de vista, de lo más
abstracto a lo más concreto.
Con todo, este libro revela a Juan como un artista apasionado y siempre deseoso de
explicar su singular aventura en esta nueva creación.
Sobre la novela:
«Si han de pecar, que ocurra con moderación.»
Nunca antes, un libro que no llega a las 200 páginas, me había hecho pensar tanto…
Tras una peculiar introducción (a mi parecer, necesaria) que pone al lector en sobre aviso de lo que encontrará en las próximas páginas, uno ya puede hacerse una idea de por dónde van a ir los tiros. ¿Quién no ha escuchado, desde bien pequeño, sobre los grandes pecados capitales? ¿Quién no ha sido amenazado con ellos?
La especial forma de relatar de Juan González, hace que se disfrute este relato documentado, mientras atravesamos por todo un recorrido sobre la historia de estas transgresiones religiosas: iremos viajando desde su creación en el siglo IV, por las diferentes referencias en el arte, el cine, la literatura, la música, y ¡hasta en los colores! Pretende que nos alejemos del sentido religioso, demostrando que los pecados van más allá de la doctrina bíblica.
Una obra, a destacar, sin duda. No ya por su contenido, atractivo para cualquier lector al que le interese la simbología y la curiosidad, sino también por la forma en la que está presentado, tanto como su acompañamiento visual. En su extenso índice, ya nos adelanta que los pecados podemos encontrarlos hasta en las mismas células de nuestro cuerpo, representando la lujuria en la fusión del acto de fecundación, y la soberbia en el proceso de mitosis. Estos son algunos de los ejemplos que nos mantendrán pegados a las páginas de este libro, como los que encontraremos relacionados con los cuentos infantiles que nos contaban antes de ir a dormir. ¿Estarían nuestros padres condicionándonos, sin saberlo, con una doctrina tan antigua como esta? Ya con Hansel y Gretel, nos metían el miedo en el cuerpo con comer hasta explotar; o si no, una bruja malvada podía aprovecharnos para cenar. Lo mismo ocurre con la historia de la pobre Cenicienta, acosada hasta rabiar por sus envidiosas hermanastras.
Escrita con un lenguaje directo, no hará más que atrapar al lector, ayudándose de las referencias en imágenes (algunas de la propia autoría del autor) y de referencias bibliográficas que encontraremos detalladas en cada capítulo.
Entretenida, curiosa, ágil y muy amena. No encontraremos diálogos entre personajes, ni una historia al uso, sino un ensayo que es capaz de hacernos profundizar en nuestro propio interior.
Sobre el autor:
Juan González es doctor de Medicina Familiar y Comunitaria y aficionado a la fotografía. Hace varios años, se propuso realizar un arriesgado proyecto sobre los Pecados Capitales. Fascinado por el funcionamiento del ser humano más allá de una perspectiva clínica, lleva desde entonces adquiriendo conocimientos sobre lo presente que dichos pecados están en nuestro día a día y cómo siempre lo estuvieron.
Su exposición muestra esta reflexión desde 300 años antes de Cristo, pasando por la Edad Media y terminando en la Edad Contemporánea, además, aplicándolos en cualquiera de los ámbitos, tales como la medicina (neurociencia, biología, psicología y psiquiatría), la educación, la literatura, las artes, el cómic, los colores, la infancia, los jueces, el sexo, las redes sociales, etc.
En esta ocasión, Juan ha decidido que su fotografía traspase los muros de una exposición para verse plasmado en estas hojas para el disfrute del lector.