Septiembre de 1938. No se firman los acuerdos de Múnich, y Alemania invade Checoslovaquia. Francia y Gran Bretaña le declaran la guerra a Hitler y se disuelve el Comité de No Intervención. Esto provoca que se desbloqueen los envíos de material bélico a la República, lo que le permite ganar finalmente la batalla del Ebro.
A finales de ese año, un joven llamado Tomás Leal se alista en la aviación republicana y, tras superar las pruebas, es enviado a la Unión Soviética a formarse como piloto en Kirovabad. Allí aprenderá a volar el caza Polikarpov I-16 y conocerá a Clara, la única mujer de su promoción. Al volver a España, combatirán en la misma escuadrilla, primero al mando del teniente Rómulo Negrín y posteriormente de Dolors Vives, que se convertirá en la primera jefa de escuadrilla de la aviación de la República.
A principios de 1940, mientras el ejército sublevado comienza a perder terreno, es destinado a una nueva escuadrilla que se está formando equipada con los nuevos MiG, el caza soviético más moderno.
A lo largo de esta historia salpicada con algunos elementos fantásticos, Tomás conocerá a diversos personajes, como al periodista y escritor George Orwell, al fotógrafo Frank Capa y a pilotos de combate como Frank G.
Tinker o Aleksander Pokryshkin. Pero también tendrá que vérselas con un formidable oponente, el único piloto alemán que sigue volando en España en el bando sublevado.